Noche De Bodas.

¡Qué carajo!, no cabe duda que estamos siendo testigos de la emancipación de Televisa sobre el que hasta hace apenas unos pocos años era su gran amo; su padre; el otrora todopoderoso señor que dictaba las ordenes, y ella (Televisa), simplemente se limitaba a decir: ¡sí señor, lo qué vos digáis!, cómo buena ama de casa sin voluntad…cómo buen soldado obediente y sumiso a las ordenes del generalísimo tricolor. Qué tiempos don Simón.

De entre las principales causas por las cuales tú, lector, no comprendes bien a bien lo nefasto que ha sido para nuestro país la relación PRI-Televisa desde el momento en que estos dos entes decidieron arrejuntarse con un mismo fin, destacan sin duda alguna estas dos: una, porque eres muy joven cómo para preocuparte e indagar por algo aparentemente inverosímil de ser; la otra, la peor de todas, es porque siendo una persona ya madura, y en muchos hasta con un cierto grado de preparación escolar cómo haber estudiado en el CONALEP de tu colonia para ser “ingeniero”, éste tipo de asuntos te vengan valiendo una reverenda y puta chingada, ya que para ti, hay cosas más importantes en esta vida cómo es el estar viendo y parloteando sobre el pinchi fútbol todo el puto día, al igual que de la exitosa comedia de las 9 PM a través de la TV.

¡Carajo!

Pues bien, hoy, a ésta nefasta relación PRI-Televisa –o Televisa-PRI si lo quieres ver de esa forma- los titiriteros que mueven los hilos de ambas mafias, en su obsesión por recuperar lo que creen que les pertenece por derecho propio, le han querido dar a esta farsa, un cariz…digamos… que de formalidad a tal relación, al darse cuenta que en estos tiempos mediáticamente competitivos, que ambos se necesitan a la de a webo para que el primero de ellos retome el control del gobierno y la otra pueda acceder al mismo por primera vez en su historia, y para ello han recurrido a esta estrategia –entre otras tantas- por demás burda por si misma:

Casorio.

Sí, una de las máximas en las telenovelas mexicanas la han llevado a la vida real…

Quién coño iba a decir que éste cliché telenovelero de toda la puta vida, con el que se le da un final feliz a toda una saga de maldades contra las chachas abnegadas y sufridas quienes lo único que desean y merecen en esta vida es el amor puro e incondicional del galán con el copete envaselinado, acabaría siendo algún día, una especie de Deja vu en nuestra ya de por si ridícula historia nacional.




Así pues, y cómo si fuese el promo de TNT que dice: “pasa en las películas (TV), pasa en la vida”, la Chacha (Televisa) se ha casado con el Galán (PRI) en éste ya desquiciadamente pendejo y kafkiano culebrón mexicano.

Lo más irónico de éste asunto, es que así, y por primera vez en la historia nuestra, y del PRI mismo, éste último accederá al poder de forma… legitima…; quién lo dijera…Charros.

Ya sabemos quienes son los prestanombres de esta mamada, los cuales, una vez que se acabe el sexenio de él, acabarán divorciándose. Seguro…


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Bueno, sólo esperemos que a los señores de Avenida Chapultepec no se le vengan a la mente alguna de esas pinchis ocurrencias sudacas de las que a Televisa tanto le gusta piratearse, y querer hacer de la Gaviota nuestra versión totonaca de la Che´ Eva Perón y obligar a sus televidentes a soñar con que ella sea nuestra primera Señora Presidenta; la salvadora; la que ahora sí nos va a sacar de la mierda en la que estamos:


¡Coño!…Ni a Kafka se le hubiese imaginado tal marihuanada; sólo a mí.


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Y ya que hablamos de las Che´s argentinas, pues que mejor que ver a una de ellas portando esa pinchi camiseta albiceleste que tanto dolor de cabeza le da a los enajenados por el fútbol:


Y por supuesto que a esta muñeca la podes ver justo AQUÍ, si es que eres lo suficientemente boludo para darle Click.

Y ahora sí:


Es cuanto.

Shalom.